Cómo reducir la celulitis en 3 pasos
La celulitis o ‘piel de naranja’ afecta, en mayor o menor medida, a más del 90% de las mujeres que han superado la pubertad.
Si bien no es un problema médico que, inicialmente, revista seriedad, sí puede producir problemas de autoestima y también es el síntoma, sobre todo cuando aparece en mujeres jóvenes, de un estilo de vida no del todo saludable.
La celulitis consiste en una acumulación de grasa, agua y toxinas en la zona más profunda de la piel, llamada hipodermis, mucho más frecuente en las mujeres debido a la especial configuración de las células de su tejido adiposo.
Las hormonas femeninas contribuyen especialmente a que se almacene grasa en la hipodermis de zonas específicas del cuerpo (glúteos, caderas y muslos), así que en las épocas donde se produce una alteración hormonal significativa son más propensas a que se acelere la presencia de celulitis: pubertad, embarazo y premenopausia. Sin embargo, durante la lactancia y en la menopausia, el proceso se ralentiza.
La mejor manera de evitar su aparición es mediante el ejercicio y una alimentación saludable. Hay, además, tratamientos estéticos efectivos que nos permitirían atacarla una vez establecida.
¿Cuáles son las medidas más efectivas para reducir la celulitis?
Paso 1: Dieta
Una dieta hiperproteica inicial, combinada a largo plazo con una alimentación donde se eliminen los carbohidratos refinados y se sustituyan por abundantes antioxidantes, puede ser una excelente manera de prevenir la aparición de la celulitis o ralentizar su desarrollo.
Los azúcares y los carbohidratos refinados propician la inflamación y, como consecuencia, la mala circulación y la retención de líquidos.
Una mala dieta es la base de numerosas patologías y está detrás de la aparición de otros problemas estéticos, como las patas de gallo.
Paso 2: Ejercicio
El ejercicio debe ser de larga duración e intensidad para permitir que el organismo queme grasas que, de otra manera, tendrían propensión a almacenarse: subir escaleras o correr por la playa son excelentes formas de ejercitarse.
Paso 3: Tratamientos
Hay una gran cantidad de tratamientos disponibles, desde las cremas hasta las intervenciones de liposucción.
El resultado de las cremas en relación al precio invertido es discutible, y las intervenciones invasivas como la liposucción pueden conllevar riesgos.
Por el contrario, hay tratamientos que presentan una muy buena efectividad con mínima invasividad. Tal vez el mejor ejemplo sea la carboxiterapia.
La carboxiterapia consiste en la aplicación subcutánea de dióxido de carbono en aquellas zonas afectadas por la celulitis, mediante una técnica muy poco invasiva, prácticamente indolora y que no conlleva ningún cuidado posterior especial, salvo el consejo de llevar una vida saludable con ejercicio y buena alimentación.
Al inyectar el dióxido de carbono se produce una distensión y alisamiento en la zona tratada, además de una destrucción de las estructuras creadas por las células adiposas.
Además, al mejorar la microcirculación, se trata directamente la causa primera de la celulitis, lo que implica un retraso en su reaparición. Combinar la terapia con los otros dos pasos, dieta y ejercicio, es una excelente manera de recuperar gran parte de la elasticidad y belleza en esas zonas del cuerpo tan sensibles a los cambios.
Recuerda: belleza y salud caminan de la mano. Los mejores tratamientos estéticos son aquellos que no sólo te hacen parecer más joven y sana, sino aquellos que, realmente, te hacen ESTAR más sana.
En la clínica Doctor Carvajal trabajamos con esa premisa: que reflejes lo que eres.
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