Recupera tu sonrisa con un blanqueamiento LED

Blanqueamiento de luz LED, recupera tu mejor sonrisa

Lo hemos dicho en más de una ocasión: la boca es una de nuestras mejores (o peores) cartas de presentación, por eso todo el mundo aspira a conseguir una sonrisa radiante. Sin embargo, a pesar de nuestros esfuerzos y por mucho que cuidemos la limpieza de nuestra boca, es inevitable que con el paso de los años los dientes pierdan progresivamente el color blanco.

Esto sucede porque la superficie de nuestros dientes contiene multitud de poros microscópicos que permiten que restos orgánicos procedentes de alimentos, bebidas, tabaco, etc. penetren en la dentina. Estos restos orgánicos se acumulan y con el tiempo dan un aspecto amarillento a nuestros dientes que nada tiene que ver con la sonrisa que nos gustaría lucir.

En estos casos, el blanqueamiento dental es una buena opción para conseguir la mejor versión de nuestra sonrisa.

¿Cómo funciona el blanqueamiento con luz LED?

Se aplica sobre la superficie externa de los dientes un gel de peróxido de hidrógeno y se sitúa sobre él una luz LED, activando así la liberación de moléculas de oxígeno. De esta forma se envía oxígeno a la dentina a través del esmalte y se descomponen los compuestos orgánicos acumulados consiguiendo aclarar el color de los dientes.

Esta técnica tiene numerosas ventajas. Para empezar se trata de un tratamiento rápido que se realiza en una sola sesión y que ofrece resultados visibles desde el primer momento. Además no requiere un periodo de recuperación y el efecto conseguido es duradero.

Con el blanqueamiento con luz LED la satisfacción del cliente está garantizada, pues si no se consiguen los resultados esperados se pueden realizar más sesiones hasta obtener el tono deseado.

Si estás pensando en realizarte un blanqueamiento ten en cuenta que es importante acudir a un profesional debidamente formado que sea capaz de evaluar las características de cada paciente para elegir la concentración de producto más adecuada y determinar si existe alguna patología que desaconseje el tratamiento.

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