¿Qué es el peeling químico?

El peeling químico es un procedimiento no invasivo con el que se tratan diversas alteraciones de la piel eliminando las capas más superficiales de células muertas. Este tratamiento sirve para eliminar manchas, disminuir arrugas, borrar marcas del acné y aportar luminosidad a la piel. Además conseguimos una piel sana, tersa y libre de impurezas.

El tratamiento consiste en la aplicación de una sustancia química sobre la piel, previamente preparada, para eliminar las capas más superficiales de la piel. El peeling debe ser un tratamiento personalizado para cada paciente, según el objetivo se pueden aplicar tres tipos de peeling: superficial, medio y profundo. La intensidad depende de la profundidad de las lesiones.

El peeling superficial se aplica para aportar luminosidad y ayudar a desaparecer arrugas finas, manchas y acné.

El peeling medio ayuda a borrar arrugas superficiales, lesiones pigmentadas extendidas y el acné en la fase más activa.

El peeling profundo elimina arrugas más profundas, pigmentación circunscrita y acné en su estado cicatricial.

Según las características del paciente podremos realizar una sola sesión del tratamiento (en casos con daños cutáneos más leves) o se pautara un protocolo de tratamiento con varias sesiones para tratar casos más severos.

Dependiendo del peeling la recuperación será inmediata o se necesitaran unos días de recuperación. Después del tratamiento es muy importante la protección solar. Para mantener los resultados es recomendable el uso de tratamientos cosméticos específicos según el tipo de piel y las particularidades de cada caso.

Este procedimiento no solo se limita a la zona facial, también obtiene buenos resultados para tratar el foto-envejecimiento del dorso de las manos, en casos de estrías o manchas corporales.