Carboxiterapia: CO2 para combatir la celulitis

La celulitis es un problema crónico que afecta aproximadamente al 90% de las mujeres. Los motivos de su aparición son muy variados y combatirla se vuelve en la mayoría de las ocasiones una tarea muy complicada.

Para empezar a luchar contra la celulitis debemos comenzar por cuidar nuestra dieta. Una alimentación correcta es clave para deshacernos de la indeseada piel de naranja. Di no a las grasas, bebe 2 litros de agua al día y, por supuesto, no olvides la importancia de realizar ejercicio físico con regularidad.

 

Puede darse el caso de que aun siguiendo estos consejos la celulitis se resista a decir adiós. Por suerte, la medicina estética dispone de diferentes tratamientos que pueden hacer más sencilla nuestra lucha.

En este caso os hablaremos de un procedimiento no quirúrgico que puede ayudarnos a conseguir el cuerpo que deseamos. ¿Has oído hablar de la Carboxiterapia? El fin de este tratamiento es, precisamente, combatir la celulitis y la flacidez así como eliminar acúmulos de grasa mediante el uso de CO2.

 

¿En qué consiste la Carboxiterapia?

Se trata de una técnica muy sencilla mediante la cual se administra dióxido de carbono por vía subcutánea mediante pequeñas inyecciones. Esta labor es realizada con un equipo diseñado para monitorizar la dosis administrada y controlar tanto la velocidad de flujo como el tiempo de inyección. Cabe resaltar que las molestias causadas en el paciente son mínimas, por lo que no suele ser preciso emplear ningún tipo de anestesia.

¿Cómo me ayuda el CO2 a combatir la celulitis?

La inyección de dióxido de carbono produce un efecto bioquímico en nuestro cuerpo capaz de estimular la oxidación de los ácidos grasos. Con este tratamiento no solo reducimos la piel de naranja, además ayudamos a nuestra piel a recuperar firmeza y elasticidad al mismo tiempo que luchamos contra la retención de líquidos mejorando la circulación sanguínea y linfática.

¿Es seguro emplear el dióxido de carbono en un tratamiento?

Como en todos los tratamientos existen contraindicaciones para personas que sufren ciertas patologías, lo mejor siempre es consultar a un experto, pero lo cierto es que se trata de un gas no toxico y no embólico que incluso empleado en altas dosis tiene unos riesgos mínimos, por lo que podemos afirmar que es seguro.

¿Cuántas sesiones son necesarias?

No existe un número fijo de sesiones, pues este dato dependerá de las características personales de cada paciente. En la Clínica Dr. Carvajal analizamos cada situación y planteamos un protocolo de trabajo con sesiones semanales. Además, este tratamiento puede ser en ocasiones combinado con otros como Presoterapia, Drenáje linfático o Mesoterapia en busca de un mejor resultado.

Una vez finalizadas las sesiones los pacientes podrán retomar su vida normal de inmediato.

 

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