Si voy a hacer ejercicio…¿qué debo comer?

Todos lo sabemos, pero aun así nunca está de más recordarlo: realizar ejercicio físico es esencial si queremos mantener nuestro cuerpo sano y en forma.

Si esta frase no es suficiente para animarte a sacar la ropa deportiva del armario, podemos concretar un poco más los beneficios del deporte y contarte que la práctica de actividad física regular nos ayuda a mantener la línea, disminuye el riesgo de desarrollar enfermedades, reduce la ansiedad y la depresión, mejora el estado de ánimo e incrementa la autoestima. Además, según el tipo de ejercicio y la intensidad con la que lo realicemos, podemos lograr incrementar de forma notable nuestra masa muscular, nuestra flexibilidad, etc.

Tan importante es el ejercicio, que la Organización Mundial de la Salud recomienda realizar al menos 150 minutos de ejercicio moderado a la semana o 75 de ejercicio vigoroso, en el caso de los adultos.

Es probable que estos datos no te pillen por sorpresa e incluso es posible que realices las horas semanales de ejercicio recomendadas. Pero, ¿qué ocurre si hablamos de las comidas después de entrenar?

Qué debemos comer antes o después de practicar ejercicio

Antes de realizar deporte

Alimentos buenos a la hora de practicar algún deporte

Si vas a realizar ejercicio, la recomendación es que consumas alimentos que te aporten gran cantidad de energía y que sean fáciles de digerir. En estos casos, la mejor opción es comer hidratos de carbono complejos (arroz, pan, pasta, patatas, galletas…) un par de horas antes de realizar ejercicio.

Si no disponemos de dos horas para la digestión entre la ingesta de alimentos y la actividad, es recomendable recurrir a hidratos de carbono simples como, por ejemplo, los yogures.

Otros sin embargo, será mejor evitarlos.

Alimentos pesados o que requieran muchas horas de digestión. Ten en cuenta que el proceso de digestión concentra toda la sangre de nuestro cuerpo, por lo que no es recomendable realizar ejercicio mientras esto sucede. Por ello, la norma debe ser evitar alimentos con alto contenido graso o en fibra.

¿Y durante la actividad física?

En este punto lo más importante será mantener el cuerpo hidratado. Lo mejor es beber sorbos pequeños cada 15 minutos, se tenga o no se tenga sed.

Si la actividad física se va a prolongar durante horas, podremos combinar la hidratación con azúcares, bebiendo además de agua bebidas azucaradas.

¿Comidas después de entrenar?

Para ayudar a nuestro cuerpo a recuperarse, es recomendable ingerir comidas después de entrenar comer de nuevo hidratos de carbono que nos ayuden a recuperar la energía y proteínas que nos ayuden a reparar los daños musculares y a generar nuevas fibras. Además, debemos beber agua para recuperar el líquido perdido.

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